¿Quién llama a la puerta?
Este es el séptimo post de llamadores
y aldabas de Toledo.
Esto no tiene fin.
Esto no tiene fin.
En esta ocasión, con motivo de
magistralmente ambientada y narrada
por Daniel, de Rutas de Toledo.
Muchas gracias a Carlos Rodríguez
por esta estupenda fotografía
de una antigua aldaba del Barrio Judío de Toledo.
Y también por revelarme
por qué muchas de ellas las colocaban tan alto
en los portones toledanos:
para que los hombres montados
a caballo pudieran llamar a la puerta
sin tener que bajarse del animal.
¡Qué buena solución!
A falta de muy pocos días
para la celebración del Corpus,
Toledo ya está bien engalanado
con toldos, pendones, reposteros,
guirnaldas...
Muchas gracias también
a Roberto y José Luís
por colaborar con sus móviles
iluminándome mientras hacía
algunas fotografías de los llamadores.
Buona serata.
ResponderEliminarMille grazie, Giancarlo! Buonanotte a te.
EliminarEs una bonita colección de llamadores de puerta. Esas antiguas localidades antiguas y tradicionales que todavía conservan este mecanismo útil para llamar a una casa ya son pocas. Que afortunado de poder ver estas fotografías y ese trabajo artesano antiguo que decora las casas.
ResponderEliminarMuchas gracias por tu amable comentario, J.S. Sí que es una suerte poder ver y disfrutar en Toledo y en otras ciudades como tu adorada Mallorca, y en otras como Mérida, Trujillo, incluso en Madrid, así como en muchos pueblos de nuestra España, estas aldabas y llamadores supervivientes de tiempos antiguos.
EliminarMe ha encantado conocer tu blog. Un afectuoso saludo.