Lo que puede dar de sí un paseo cortito por el Casco.
Este es ya el cuarto reportaje de aldabas de Toledo...
Y parece que esto no tiene fin. ;)
Así, como quien no quiere la cosa, me encontré, sin quererlo,
con la aldaba de mano lánguida más bonita
que yo haya visto en mi vida.
¡Preciosa!
Hasta la fecha, la mejor mano lánguida que yo había visto
estaba en Santiago de Compostela.
Voilà!
Pero la que descubrí el otro día en Toledo
me ha prendido el corazón.
La verdad es que son prácticamente iguales,
pero cada una tiene su toque especial.
---ooo---
05-08-2023
Es una pena que hayan arrancado
los llamadores de mano lánguida.
Fui a enseñárselo a Paloma
y ya no estaban.
No sé si volveré a encontrar otro
tan perfecto y bonito como este.
---ooo---
El paseo fue corto: desde la Plaza de las Tendillas,
pasando por la Plaza de San Vicente,
subiendo por la Calle de la Plata,
y el tramo desde la Calle del Comercio a Zocodover,
pero estuvo bien entretenido.
Aquí os dejo una muestra.
Arriba, la puerta grande del patio
del Restaurante El Botánico,
(Botánic Bar Legendario),
en la Plaza de San Vicente.
Me encanta, con sus buenos clavos ornamentales,
típicos de los portones de Toledo,
su aldaba bien hermosa
y ese rosario incrustado tan curioso.
Los agarraderos o agarradores para cerrar la puerta
son otro elemento ornamental que últimamente
incluyo en los reportajes.
Algunos van conjuntados con la aldaba.
También algunos picaportes.
Toledo es siempre un tesoro
lleno de maravillas por descubrir.
Nunca defrauda.