Pasear por el centro de Madrid tiene su encanto.
Te puede sorprender encontrarte el patio de un palacete abierto, curiosa decoración urbana, incluso aldabas históricas de las que a mí me gustan, algún bar centenario, grafitis, luminosos fluorescentes, adornos, estatuas, iglesias...
Una gran urbe puede ofrecer muchas sorpresas a los paseantes.
¡Qué alegría encontrar en Madrid
estas aldabas de mano lánguida tan hermosas!